Antes de continuar leyendo este post, considero prudente hacer una advertencia: El lector no descubrirá nada nuevo ni llegará a conclusiones que no conociera previamente. Sólo me servirá en cierto modo como catarsis; y si alguien ha decidido continuar leyendo, su mirada es más que bienvenida.
Uno de mis trabajos se lleva a cabo en una universidad. Me gusta debo admitirlo, pocas veces puede considerarse que un día es igual a a la anterior jornada laboral. Además, puedo leer y conocer sobre diversos aspectos. En uno de estos lapsus de iluminación en el trabajo, me encontré con un documento emitido por el Foro Económico Mundial sobre la competitividad de la nación del tequila y del buen José Alfredo.
Entre otras cosas, me llamó la atención una lista de los aspectos que se consideran como los máximos obstáculos para el desarrollo monetario de nuestro sacrosanto, querido y vilipendiado terruño. Piense en sus favoritos, y veamos a cuántos le atina:
- Gobierno ineficiente: ¡Wow!, esa sí que no la veía venir. Nuestra clase política despilfarradora y poco pensante es uno de los primeros elementos en la lista. Desgraciadamente, tal vez sea un factor de los más complicados de modificar. Con agrado veo activistas que desde sus trincheras están intentando cambiar esto, tal vez un poco de presión ciudadana colabore con la causa.
- Corrupción: No bueno, tan bien que íbamos con el puro gobierno. En esto de la corruptela ya andamos saliendo manchados también...seguro el amigo de otro amigo nuestro ha dado mordidas, por ponerla en una escala pequeña. Pero la corrupción existe también en gran escala, millonarios contratos entre corporaciones y el gobierno y demás cosas del diablo... esas sí que dan asquito.
- Infraestructura inadecuada: Si no se planea como se debe, y a eso le sumamos que el dinero desaparece al más puro estilo de Beto el boticario (porque hasta para hacer transas son chafas, pero aun así las hacen), no podemos esperar que haya obras adecuadas hechas en tiempo y forma para las necesidades del país.
- Regulaciones laborales excesivas: El pueblo unido jamás será vencido, el enemigo es el patrón, la tierra es de quien la trabaja y demás frasecitas pegadoras, fruto del sindicalismo charro y torcido de nuestro país vienen a la mente en este punto.
- Impuestos: Somos uno de los países donde más impuestos se cobran... y obviamente menos se hace con ellos. Fruto de varios puntos que ya fueron mencionados. Además, si a eso le sumamos que los impuestos sólo se nos cobran a una ínfima parte de la población metsicana, pues la cosa sigue sin pintar bien.
- Fuerza laboral pobremente educada: ¿Pero qué tal está el sindicato de profesores?, igual no muy educados, pero ellos sí, con harta lana. La iglesia en manos de Lutero, o peor aún la educación en manos de Elba Esther Gordillo (espero no se me aparezca en la noche por escribir su nombre), esto a un nivel básico. A un nivel superior algunos alumnos llegan con pobrezas intelectuales severas, incapaces de ser solucionadas por un sistema muchas veces ineficaz, víctima de otros intereses.
- Ética laboral pobre: Bueeeeno.. aquí que nos llegó la pedrada con todo. Bueno, seguro a la distinguida concurrencia de este sitio no.. sólo a otros pelados de otros blogs. Pero pensemos, las cuestiones económicas que esto acarrea, como muestra un botón: ¿Sabían que los bancos cobran más intereses en países donde la honestidad y el trabajo en equipo son difíciles de encontrar?.. (entre otros asuntos claro), esto hace más difícil el acceder a financiamiento, lo cual frena la creación de empresas, inversiones y así nos la podemos llevar. ¿Cómo son las tasas en México?
¿En qué aspectos podríamos tener cierta influencia? Sé que es complicado y muchas razones existen para desalentarnos, pero supongo que en alguna esfera de nuestra existencia algo podremos hacer para que el barco no se nos hunda... más. Podemos ser héroes... y no precisamente de los que usan los calzones por arriba del pantalón.
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